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ELISEO GUZMÁN NEGRÓN. 5 DE ABRIL 1944 – 30 DE JULIO 2020

ELISEO GUZMÁN NEGRÓN 5 DE ABRIL 1944 – 30 DE JULIO 2020

Con Eliseo nos unía una amistad desde los años sesenta. Empezó en en centro de estudiantes de la facultad de arquitectura. El CEA presidido con dinamismo por Eduardo Figari sacó una revista mensual dirigida por Carlín, en la que colaborábamos con Eliseo en artículos e ilustraciones. La revista tenía una carátula aparentemente abstracta pero que en realidad era la doceava parte de la cara del Che Guevara. El gran afiche se formó a los catorce meses de su casi puntual aparición. En ella se hacía crítica a los talleres de diseño, sobre arquitectura y artículos políticos, con ilustraciones de Eliseo, de Carlín y mías. El estudio de Eliseo en su casa del Bosque de Matamula  se convirtió en lugar de reunión y trabajo, posteriormente en centro de propaganda gráfica política.

La casa de Eliseo era una joya de la arquitectura “Art Deco”. El padre de Eliseo fue el arquitecto Augusto Guzmán Robles, prolífico y exitoso arquitecto, nacido con el siglo,  autor de muchísimas casas y quintas en inconfundible estilo “Art Deco”. Terminó de construir el Palacio de Justicia y diseñó la Clinica Italiana, entre otras muchas obras. De carácter serio, un poco adusto, había venido a Lima de su nativa Huaraz a raíz de uno de los trágicos aluviones de la segunda década del siglo en la que murió gran parte de su familia. Trabajador incansable llegó a ser senador representante de su tierra natal. La mamá de Eliseo , la amable señora Delia, atendía a su esposo con deliciosas viandas huaracinas, razón por lo cual siempre que pude “me hice el encontradizo» a la hora del almuerzo.La casa de Eliseo estaba exquisitamente trabajada, los muebles diseñados e integrados a la arquitectura en todos sus detalles. Eliseo heredó esa paciencia para el trabajo en obra, el cuidado de los acabados en la construcción y el trato con los trabajadores. Asimismo heredó de su padre el trato social, la amabilidad, comprensión y la tolerancia en las ideas. Por eso, a pesar de sus opiniones radicales, siempre mantuvo excelentes relaciones con gente de los diferentes estratos sociales. Siempre tuvo una gran amplitud de criterio. 

El grupo de jóvenes artistas gráficos estudiantes que integraba Eliseo hizo operativos sensacionales como pintar en una amanecida una enorme y perfecta cara del Che Guevara proyectada en el frente del decanato de la facultad. La mañana siguiente, cuando llegó el decano, quedó sorprendido con la belleza del trabajo y permitió que se quedara por un tiempo. Otros trabajos realizados fueron enormes afiches pintados en módulos que los grupos de propaganda de VR pegaron durante la noche en los altos tanques de agua de San Marcos y la Agraria con los rostros de Lenin y Marx.

Otro rasgo de Eliseo era la inmutabilidad. Tenía un aspecto serio, casi profesoral, siempre vestido con corbata, desentonaba a veces con el resto de los estudiantes. En una marcha estudiantil que fue acorralada por la policía en el Rímac, Eliseo tomó del brazo a Dalmacia Samohod, excelente actriz secretaria del rectorado, y cruzó seriamente por entre el pelotón de la guardia de asalto, que respetuosamente se hizo a un lado para que la distinguida pareja pasara.

Cabe señalar que los años en que estuvimos en la facultad de Arquitectura fueron de mucha riqueza. Bajo la batuta de Cartucho Miro Quesada, Adolfo Córdova y aún Santiago Agurto, se desarrolló una actividad cultural enorme en la facultad de arquitectura. El Auditorium recibió las visitas y conferencias de eminencias como Oppenheimer (creador de la bomba atómica), Pablo Neruda, José Luis Borges. Se desarrolló el histórico debate entre Mario Vargas Llosa y Gabriel Garcia Márquez.  Se fundó la Escuela de Artes Visuales, anexa a la facultad con artistas notables como profesores : Cristina Gálvez, Alberto Guzmán, Juan Manuel Ugarte Eléspuru, el escultor Varela, Abelardo Oquendo, Carlos Bernasconi, Félix Oliva, entre otros.

Eliseo y Carlos Tovar fundaron una oficina de diseño en la calle Porta de Miraflores.Yo por ese entonces me encontraba muy aislado. Eliseo me buscó un día, y al verme tan decaído me propuso hacer una maqueta para un conjunto de viviendas vacacionales para los Maestros (Ancije). Me puse tan contento con el encargo que en tres días armé la maqueta. Eliseo me sacó del marasmo y la depresión. Creo que casi no nos pagaron por el trabajo, pero para mí fue un triunfo. Allí comenzó nuestra cooperación. 

Trabajamos juntos en muchos “stands” de la Feria del Pacífico. Diseños y contratos de obra de esa arquitectura “al paso” para empresas comerciales. Un encargo muy memorable fue el de un “stand” para las Empresas Eléctricas. Había que hacer una maqueta realista del “Puente de San Luis Rey” sobre el río Apurimac. Yo me encargué de los cerros y el río. Eliseo se concentró en el puente de Ichu. Para esto fuimos hasta San Mateo para tomar nota de la forma de los cerros y las piedras. Los cerros esculpidos en yeso por mí  y el puente tejido en soguilla por Eliseo quedaron perfectos. Incluso pusimos una cisterna con una bomba para que el agua discurriera por debajo del puente. Pero por desgracia el río Apurimac se desbordó media hora antes de que llegara Velasco a inaugurar el pabellón. Después de enormes esfuerzos logramos limpiar el lugar impidiendo el paso del agua minutos antes de la llegada del mandatario.

Eliseo llevaba una agitada vida sentimental. Se construyó una casita a la espalda de la Iglesia de la Ermita, en la Bajada de los Baños de Barranco, con vista al mar al borde de  los acantilados. Casi todos los fines de semana organizaba reuniones criollas, donde tocaban los mejores músicos del barrio de Malambo, de Barranco. Allí cantaba Rosita Guzmán, su padre el gran compositor “Tato Guzmán”, Susana Baca y otros artistas. Poco a poco se fue llenando de entusiastas visitantes. Tocaba también un afiatado grupo criollo integrado por su hermano Eduardo y su grupo del Rímac que se denominaba “Se armó la cojudez”.Una noche se apareció Juan José Vega acompañado de Cuchita Salazar. Toda la jarana transcurrió con normalidad, pero resultó que a media noche desapareció el ilustre visitante. A eso de las cinco de la mañana le tocaron la puerta a Eliseo. Era Juan José Vega en un estado calamitoso: Se había caído al precipicio y toda la noche la pasó escalando la cuesta. A partir de esa fecha la peña se llamó “El Precipicio”.

Eliseo estableció cordiales relaciones con los jóvenes integrantes del “Grupo Huayco” en Barranco, conjunto de jóvenes artistas organizados inicialmente alrededor del escultor Pancho Mariotti.  Un día me invitó a que lo acompañara. Para mí fue alucinante ver este grupo de guapas artistas llevando una vida libre y creativa.  Este fue el inicio de mi compromiso sentimental con la pintora Mariela Zevallos.

Posteriormente la casa del grupo fue tomada por un grupo de empresarios del espectáculo. Eliseo y yo nos encargamos de transformar ese antiguo local en un gran salón sin botar el techo. Insertamos tijerales de fierro como tarjetas a través del edificio portando el techo, y luego eliminamos los muros interiores. Esa es la actual “Estación de Barranco”

La oficina de arquitectura y Arte Gráfico se trasladó posteriormente a la calle Las Camelias , en San Isidro. Allí se integró a trabajar Jorge Burga. Eliseo estableció relación con el arquitecto Suizo Emilio Luisoni con quien fundaron el proyecto Mirhas, para construir casas populares en barro y caña en el distrito de La Arena, en Piura, canalizando ayuda internacional.  Este proyecto duró varios años teniendo un gran contenido social. La vida sentimental de Eliseo se estabilizó. Se casó con la historiadora Giselle Beck y tuvo dos hijos. 

Posteriormente realizó su obra profesional en forma independiente. La oficina como proyecto de grupo concluyó su función. Varios años después Eliseo se separó de Giselle Beck. Estuvo varios años viendo solo.

En el año 2005  Javier Diez Canseco inauguró un local del Partido Socialista en el local de la plaza Bolognesi, para lo cual se realizó una fiesta de recaudación de  fondos.Pilar Núñez Carvallo, testigo de la ocasión, cuenta que “Pupi Romero y yo fuimos las que promovimos su encuentro con Marta Ribbeck. Le pedimos a Eliseo que nos acompañe a la fiesta de VR y ahí en la cocina desapareció con Marta. Pero caballero él, igual cumplió con regresarnos a nuestras casas. A partir de allí no se separaron.”

Martha y Eliseo comenzaron a vivir y trabajar juntos. Construyeron el hermoso edificio de la plaza San Francisco, y lo demás es cosa por todos conocida. Martha al frente de ese lindo departamento ha sido anfitriona de todos su amigos, los suyos y los de Eliseo.La entrega de ambos  en  promover inicialmente el Frente Amplio y luego Nuevo Perú se plasmó en diseños como la imagen a tamaño natural de Verónica Mendoza, afiches, y otros para la campaña del 2016. Otra iniciativa inolvidable de Marta y Eliseo fue el “camioncito valiente” en el cual Verónica recorrió el sur del Perú en 2017.

Con la partida de Eliseo ha muerto para siempre una parte esencial de nosotros mismos, sus amigos entrañables.

Estuardo Núñez Carvallo.

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