Han transcurrido apenas los 2 primeros meses del gobierno del Presidente Castillo en medio de una campaña permanente de desestabilización de sectores golpistas secundados por quienes no quieren cambios en nuestro país y se aferran a sus privilegios y a unas reglas de juego que ya no dan más. Sin embargo, el gobierno ha desplegado enormes esfuerzos para atender las principales preocupaciones de las familias del Perú: la salud y la economía. En apenas dos meses se ha pasado del 17 al 37% de la población vacunada y desplegado 15 mil brigadas de vacunación que van al encuentro de la gente, se ha comprometido S/. 5 500 millones para apoyar la subsistencia de 13,6 millones de peruanos y reactivar la economía a través del bono Yanapay, así como otros programas de empleo e inversiones, se han tomado medidas para abaratar el balón de gas, entre otras acciones importantes que saludamos.
Sin embargo, desde el Nuevo Perú consideramos que es momento de enrumbar cambios de fondo que son indispensables e impostergables para poder construir un país con justicia e igualdad, como, por ejemplo:
- Reforma tributaria para recaudar más y distribuir mejor: necesitamos recaudar más recursos para poder invertir más y mejor en salud, protección social y educación. El Perú es uno de los países del mundo con la más baja presión tributaria, por debajo del promedio latinoamericano, por ello, urge impulsar la reforma tributaria anunciada por el Ministerio de economía y finanzas que incluya la simplificación de los trámites tributarios para las Mypes, la revisión de las exoneraciones tributarias y el fortalecimiento de las capacidades de la SUNAT para combatir la evasión y la elusión tributaria, así como un mecanismo para cobrar las importantes sobreganancias que tiene actualmente el sector minero con precios de los minerales en el marcado internacional nunca antes vistos.
- Gas barato para las familias y las Mypes: es inadmisible que,teniendo gas natural en varias regiones de nuestro país, estemos pagando los precios más altos de América Latina y que luego de 17 años de explotación de Camisea, solo el 10% de familias tengan gas natural en sus casas. Urge relanzar la masificación del gas natural a través del Gasoducto del sur y una red nacional de ductos de manera planificada y coordinada con el sector privado desde una Autoridad nacional de masificación del gas. Para ello, corresponde renegociar los contratos de Camisea para poder garantizar su uso para el mercado interno y mejores precios de venta en el mercado internacional para poder mejorar la recaudación vía regalías. Es tiempo de nacionalizar nuestros recursos, es decir, poner nuestros recursos al servicio de la nación, de las familias del Perú, en el marco de una transición hacia energías más limpias y renovables.
- Segunda reforma agraria: Tal como lo ha anunciado el ministerio de agricultura, debe implicar un proceso de organización, movilización y capacitación de los productores y productoras agrícolas y pecuarios del país, impulsando la asociatividad y el cooperativismo, involucrando especialmente a las de la pequeña agricultura familiar y campesina que fueron tradicionalmente excluidos de las políticas agrarias en los últimos años. Asimismo, debe significar un proceso de tecnificación e industrialización del agro nacional que implique un amplio programa nacional de riego y asistencia técnica, un sistema nacional de compras públicas, una banca de fomento rural y agrario con créditos accesibles, entre otras medidas.
- Reforma laboral con y para los trabajadores: saludamos la eliminación de la suspensión perfecta y consideramos que el gobierno debe hacer efectivos sus anuncios referidos a la eliminación progresiva del régimen CAS así como la aplicación de la negociación colectiva de remuneraciones en el Estado, en función de criterios técnicos y económicos establecidos con transparencia y planteamos la necesidad de revisar los regímenes laborales discriminatorios aún vigentes en el país y avanzar hacia una política más amplia de protección social.
- Autonomía económica y reconocimiento del trabajo de cuidado de las mujeres: la pandemia ha develado la importancia del trabajo de cuidado que realizan principalmente las mujeres y que no es reconocido ni remunerado, por ello saludamos el anuncio de crear un Sistema nacional de cuidado articulando, capacitando y asegurando remuneraciones dignas a las cuidadoras en los centros de protección a personas dependientes, guarderías y programas de acompañamiento familiar, entre otros. Por otro lado, es fundamental que el Estado promueva la autonomía económica de las mujeres a través de programas de capacitación y acceso a crédito y asistencia técnica para poder desarrollar sus proyectos de vida y no tener que depender, como ocurre muchas veces, de sus agresores. Esta será una medida importante y eficaz de prevención de la violencia hacia las mujeres.
Todas estas propuestas, representan cambios de fondo, que en años anteriores se quedaron en el papel, pues no hubo voluntad política para llevarlas a cabo. Es tiempo de abordarlas. Así también, es tiempo de abrir un gran diálogo nacional para construir juntas y juntos un nuevo pacto social que se exprese en una nueva Constitución, que no puede ser resultado de ninguna imposición sino por el contrario de un proceso verdaderamente democrático y participativo.
Desde el Nuevo Perú expresamos nuestro compromiso de movilizarnos y de contribuir con propuestas concretas a estas iniciativas, con compromiso, responsabilidad, voluntad de diálogo y concertación entre los diversos sectores del país.
28 de setiembre 2021